Desde su árbol, el pequeño koala comparte inquietudes y sentimientos. A veces deseos, otras sueños… casi siempre con el mismo interlocutor, el amigo pájaro que, a menudo, contrasta sus ensoñaciones con la realidad. A los diálogos también está invitado el camaleón, que escucha atentamente las conversaciones en torno a conceptos fundamentales, reflexiones casi filosóficas, incluso composiciones poéticas que convierten a los protagonistas en entrañables personajes llenos de dudas y buenas intenciones. Carismáticos caracteres que ayudarán a comprender con mayor profundidad cómo es la filosofía que guía la vida de un marsupial tan popular como este. Escenas desprovistas de fondos, casi siempre ambientadas entre las ramas, otorgan todo el protagonismo a las ideas de los amigos, palabras sin enmarcar en bocadillos o cartuchos narrativos pero estructuradas a partir de elementos habituales en el lenguaje del cómic.
